La autoestima es un concepto psicológico que hace referencia a la valoración o apreciación que una persona tiene de sí misma. Es la percepción que una persona tiene de su propia valía, importancia y dignidad como individuo. La autoestima se refiere a cómo una persona se ve a sí misma, cómo se valora y cómo se percibe en relación con los demás.
La autoestima puede ser alta o baja y puede afectar a la forma en que una persona se comporta y toma decisiones.
- Autoestima alta: se refleja en una mayor confianza en uno mismo, una mayor capacidad para afrontar los problemas y una mayor capacidad para relacionarse con los demás.
- Autoestima baja: se refleja en una mayor vulnerabilidad ante los problemas, una mayor dependencia de la opinión de los demás y una mayor dificultad para relacionarse con los demás.
Síntomas de una autoestima baja:
- Falta de confianza en uno mismo.
- Inseguridad en las relaciones interpersonales.
- Dificultad para tomar decisiones.
- Sentimientos de inferioridad.
- Baja tolerancia a la frustración.
- Excesiva preocupación por la opinión de los demás.
- Dependencia emocional.
- Tendencia a la victimización.
Causas de una autoestima baja:
- Experiencias negativas en la infancia o adolescencia.
- Comentarios negativos de los demás.
- Comparación constante con los demás.
- Falta de logros o metas alcanzadas.
- Poca o nula retroalimentación positiva.
- Problemas de salud mental.
- Problemas económicos o laborales.
Tipos de autoestima:
- Autoestima positiva: Es cuando una persona tiene una valoración positiva de sí misma, se valora y se percibe como una persona capaz y digna.
- Autoestima negativa: Es cuando una persona tiene una valoración negativa de sí misma, se subestima y se percibe como una persona incapaz e indigna.
- Autoestima fluctuante: Es cuando una persona tiene una valoración de sí misma que cambia constantemente, dependiendo de las circunstancias y de la opinión de los demás.
Estrategias para mejorar la autoestima:
- Aceptar y valorar las propias cualidades y limitaciones.
- Establecer y alcanzar objetivos realistas.
- Practicar la auto-afirmación.
- Rodearse de personas positivas.
- Aprender a decir «no«.
- Practicar la gratitud.
- Aprender a relajarse y a meditar.
- Buscar ayuda profesional si es necesario.